En estas fechas, ya vamos observando los decorados de navidad en calles, supermercados, escaparates...
Pronto llega la navidad, nos vienen recuerdos, nostalgias de nuestra infancia... y podremos ver a los más pequeños contentos y deseosos de recibir los regalos de esas cartas que cada año envían dirigiéndose a 'Papa Noel' o los 'Reyes Magos'. Pero... ¿cuál es realmente el verdadero espíritu navideño? ¿Cuál es el verdadero significado de esos regalos? ¿Hemos ayudado a otros? ¿Nos hemos puesto a reflexionar que en medio de esta vida ajetreada que llevamos hay personas que tienen mucho menos que nosotros? ¿ Nos hemos puesto a pensar que ellos se conformarían con poco? ¿Pensamos en esos niños que pasan su vida en hospitales y que quizá nunca hayan recibido un juguete, en esas personas mayores que se sienten solas y olvidadas o en aquellas personas que han perdido un ser querido y su asiento quedó vacío?
En cualquier fecha, se puede revivir el espíritu de la navidad, abriendo el corazón a quién necesita ayuda.
No hace falta nada material, solo es necesaria la comprensión y tener en cuenta a los demás. Pues, ayudando nos sentiremos satisfechos y con el corazón lleno de gozo como si hubiéramos recibido el mejor regalo.
Los más bellos regalos del mundo son las buenas obras hechas desde el corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario