sábado, 30 de marzo de 2013

Stmo. Cristo del Perdón

La Semana Santa es una de las fiestas del año que más me gusta, porque en las calles se puede respirar el  incienso y Cristo es un ejemplo de vida y sacrificio por todos nosotros.
Este año ya pasó el Jueves Santo, ahora toca esperar otro año. El ambiente era difícil de explicar con palabras por tantos rostros emocionados a la salida de nuestro Cristo del Perdón. Nosotros... los cofrades siempre impacientes por ver la Salida de Nuestro Señor y el esfuerzo de los costaleros para sacarlo de la Iglesia. Salida impresionante, difícil de explicar...en esos momentos solo podía sentir. El capataz da tres golpes de martillo y el Cristo es elevado al cielo. Es aquí cuando dos lágrimas cada año siempre recorren mis mejillas, sentimientos encontrados, recuerdos que vuelven a mi memoria, pero sobretodo, siento emoción de haber ido un año más siguiendo el paso, con mucha ilusión, fe y devoción. Y aunque el recorrido se hace largo, la Fe es la que hace que sigamos adelante y no salgamos del paso, pues es la Fe la que nos mantiene firmes en nuestra vida, es sentir que en silencio Dios nos contempla y descubrir su gran amor hacia nosotros.
El Jueves Santo, bajo el capirote, tuve la impresión como de que el tiempo se detuviera y cada uno de nosotros podíamos sentir esa emoción que sentimos todos los cofrades cuando vemos a Nuestro Cristo en la calle, como cada año haciendo su recorrido, y en las personas que en las calles del pueblo se encontraban siguiendo el paso.
Cuando el Cristo del Perdón llega a su casa, acaba la procesión y aunque en mí aflorase el agotamiento o cansancio, me sentía y me siento satisfecha del haber cumplido un año más y cumplir ese sueño, esa ilusión que a los que vamos tras del paso nos une...
Este año ya es el undécimo año que sigo al Cristo del Perdón. Ahora solo queda esperar al próximo año para poder volver a verlo en la calle procesionando.

domingo, 24 de marzo de 2013

La felicidad depende de nosotros mismos

La felicidad depende de cada persona. Nosotros somos quiénes determinamos ser felices en cada situación o en cada momento de nuestra vida.
También hay gente que dice que no puede ser feliz por enfermedades, dinero... pero, aún así, pueden ser felices, porque ser feliz es una actitud ante la vida que cada uno decide y aunque a veces resulte difícil, podemos lograrlo...

sábado, 16 de marzo de 2013

Para todas las madres pero especialmente, para aquellas con familiares discapacitados

Ellas son grandes y luchadoras por naturaleza, llenan de vida a sus hijos, sean discapacitados o no. Son ellas un buen ejemplo a seguir, las que siguen intentando sacar a sus hijos adelante y siempre están pendientes a que no nos falte nada, a que seamos felices...
Son únicas, fuertes, incansables... Son vida, dan vida y lo mismo que para una madre un hijo es su vida, para nosotros nuestros padres también lo son; son nuestro mundo, nuestro ejemplo a seguir, de los que aprendemos y nos enseñan cada día...
Las madres con hijos discapacitados caen y tropiezan y en momentos no saben como actuar pero ante situaciones difíciles, reaccionan rápido y siguen luchando con más fuerza que nunca por ver a sus hijos felices, sean como sean, porque a fin de cuentas todos somos iguales; solo que las personas discapacitadas necesitan cuidados especiales; luchan por que no se discrimine a sus hijos discapacitados o con problemas; luchan porque nadie los intente apartar de la sociedad, simplemente, porque deben vivir como uno más; porque ante todo, siguen siendo personas y ellos también sienten... Nuestras madres son las luces que nos guían en nuestro camino de la vida. Son ellas... nuestras madres; las que nos enseñan a seguir progresando, a seguir avanzando ante cualquier situación y siguen luchando porque no dejemos de ser nosotros mismos ante cualquier circunstancia.
Las mujeres y madres con familiares discapacitados son las que iluminan nuestro cielo o el mundo; simplemente con una bella sonrisa. Ellas son admirables, increíbles, únicas...

sábado, 9 de marzo de 2013

Construyendo mi camino

Vivo la vida, pensando en dar un paso más cada día, disfrutando de pequeños momentos o simplemente de bonitos recuerdos, dando un paso más también hacia mis sueños.
Hay gente que se preocupa con imposibles, con algo que no llegarán a alcanzar, pero yo vivo mi día a día, disfrutando y viviendo cada momento que la vida me da, vivo mi presente, pues el futuro tarde o temprano llegará y el pasado ya se fue.
Nunca perderé ilusiones, deseos, ni dejaré de soñar... seguiré construyendo mi hoy en el camino de mi vida con pedacitos de todo lo que me haga feliz, esos pedacitos me los guardaré y en mi recuerdo permanecerán siempre...

martes, 5 de marzo de 2013

"Somos como cajitas musicales"

Las personas nos asemejamos a las cajitas musicales. Os preguntaréis por qué. Os lo explicaré.
Yo creo que nos parecemos porque muchas tienen adornos, pero por dentro están vacías... Otras no tienen adornos, pero por dentro tienen un bello jardín. Otras cuando las abrimos se encuentran llenas de recovecos en su interior y muchas veces nos perdemos entre sus laberintos... y luego, están aquellas que con una sola mirada, sabemos como van a actuar siempre... Pues bien..., a las personas las conocemos y queremos después de haber escuchado la música de su interior, del corazón. Porque esa música tiene algo de magia, algo muy bonito lleno de vida, algo de muy dentro de cada alma...