Hoy llegaba la tan temida Selectividad para much@s, no tanto para los que ya lo hemos querido intentar más de una vez, aunque sin suerte. El destino no me sonríe una vez más.
Siempre tuve sueños y objetivos y desde bien pequeña supe lo que quería. Ellos me motivaban a seguir cada día. Siempre pensé que luchando lo conseguiría, pero parece ser que el fracaso me persigue...
Vivía no muy motivada, pero creía que con esfuerzo lo conseguiría y tenía un mínimo de confianza hacia mí, pero esa poca confianza que tenía, creo que terminó por esfumarse. Pues, pensaba que todo iba a ir bien, cosa que no fue así. Una vez más me siento desilusionada, a veces pienso que no sirvo para nada... Ahora me doy cuenta que las cosas no siempre salen bien, ni siquiera como las proyectas. Pero, aun así, no me rendiré, aunque tenga que intentarlo mil veces, lo haré, continuaré luchando por lo que quiero. Sé que aunque existan los días buenos y malos, cada día es un nuevo comienzo para ver el mundo de otra manera más positiva.
Soy consciente que quizá todos mis sueños no podrán realizarse, tampoco sé cuantos se cumplirán, pero eso no me detiene, me seguiré esforzando al máximo. Sólo espero que algún día la vida me sorprenda, porque cada cosa llega cuando tiene que llegar; que si algo está destinado a ser, será.
Creo que todo en la vida sucede por alguna razón. Sólo debemos reflexionar, analizar y actuar. Supongo que mi destino puede cambiar... Aún no he perdido por completo las esperanzas, pero tampoco quiero vivir de ilusiones.
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