A veces quisiéramos cerrar los ojos y pensar que no es real, que aquello que algún día soñamos en algún momento de la vida llegará, pero el tiempo sigue pasando como agua entre los dedos y sentimos el mundo caer encima de nosotros. Es entonces cuando nos damos cuenta que no debemos detener nuestros pasos, que no debemos mirar hacia atrás mas que para ver el camino recorrido y que somos capaces de tanto... No hay nada inalcanzable. El tiempo no se detiene por nada ni por nadie... Sigue tu camino... Cae, levántate, tropieza, pero siempre sigue adelante.
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