martes, 11 de agosto de 2020

Un día de lluvia

El cielo gris anuncia tempestad y sin embargo, me provoca serenidad, sosiego, paz...
Esas gotas que aparecen nos hablan del tiempo y reflexionamos, nos ponemos a pensar en una mañana que se avecinó tormentosa.
Más tarde, como la vida misma, apacigua. Y es que necesitamos tanto los días grises como los días en que sale el sol para aprender a valorar y valorarnos.
Tiene que llover. La Tierra lo necesita, nosotros lo necesitamos.

Cristi Alabarce



No hay comentarios:

Publicar un comentario